Tras nuestra experiencia en la planta de pediatría, rodeados de niños que pese a la mala suerte de estar enfermos siempre nos concedían una sonrisa, solo podemos transmitir la fuerza de estos pequeños pacientes tan importante para su recuperación y admirar su valentía.
Probablemente esta fuerza y valentía sea fomentada por el colorido, las imágenes y la alegría que se desprende en esta planta.
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